El COE ´38 de Custom Chicken an Pig Galpon

En el reino de Río Cuarto, Córdoba, emerge del relieve lo que parece un simple galpón para ojos mortales comunes, pero en realidad es un sitio sagrado, un templo lleno de magia conocido como Custom Chicken and Pig Galpon. En el ingresan pilas de viejos fierros, y por la magia de Nicolás, estos cobran vida y emergen una vez más rugiendo como verdaderos MONSTRUOS DEL ASFALTO, que aceleran nuestro corazón y dilatan hasta el estallido nuestras pupilas. Hoy te voy a relatar sobre uno de ellos, el COE ‘38

Todos soñamos o deseamos, pero hay una raza de humanos que se separa del resto, son esos soñadores que corren tras su sueño, aunque parezcan imposible, lo atrapan, los montan y cambian el mundo. Nicolás Santa Cruz es uno de ellos. Por mucho tiempo soñó con un Coe.

Es innumerable la cantidad de tiempo y lugares que visito en busca de este unicornio, encontrando siempre Bedford, Grospales entre otros. Cuando ya había desistido de alcanzarlo, regresando del Carfest en caravana con los chicos de AM RODDERS, intercambio palabras con Flavio Corazita. Este le comenta que sabía de una cabina 38 en el patio de un amigo. Nicolás sonrió con cierto brillo en sus ojos, pero no quería caer en las garras de la ilusión, debido a sus experiencias previas.

Al pasar unos días le solicita a Flavio que el pase algunas fotos. Cuando la imagen se presenta en la brillante pantalla, la carretilla del soñador casi da contra el suelo. Allí, se revelaba la cabina de un Coe bastante maltratada. La suerte pertenece a quienes se mueven, y he aquí esta le obsequiaba la posibilidad de atrapar ese sueño

Lo antes posible viajo en busca de este resto férreo sin vida, con su viejo tráiler. Al llegar los ojos de Nicolás devoraron la cabina. El veía algo más hermoso que un cero kilometro mientras su padre fruncía el rostro en una extraña mueca, viendo solo una pila de chatarra.

Charla mediante con el dueño llegaron a un acuerdo, mientras el padre de Nico puteaba en todos los idioma, hasta en Jampones, lo que lo movió a no comprarla. El sueño y la vida de esta obra de arte sobre metal, corrían peligro de esfumarse para siempre. Pero al llegar a su hogar, cuando su padre se encontraba ausente, Nico llamó al dueño de la “chatarra” y palabras va palabras viene compró la cabina, y el sueño paso de una idea al mundo de lo material… de lo tangible.

Lo primero que se hizo fue llevarlo a arenar en su pueblo de Ordezqui, y luego al taller de Roberto Grant, quien comenzó con los rituales de resucitación, mientras se compro un 292 fase 2 como planta motriz, un eje de Loba, y reformar el chasis.

Hoy el Coe con su imagen sacude nuestras mentes mientras absorbe nuestros ojos y corazones. El regresó del más allá, del dominio de la parca y el olvido, a reclamar las interminables rutas.

Elevad una copa de fría cerveza en honor de este Monstruo del Asfalto, y de Custom Chicken and Pig Galpon, brindemos deseando que puedan traer a la vida a muchos mas.

por Rafael Theller

Te invito a conocer la página de este grandioso taller

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